“Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante.” Efesios 5:2
3. Reflexiona
En el devocional anterior vimos cómo hemos sido amados con el amor de Dios, el amor Ágape (ἀγάπη), y el entender esta Verdad nos debe llevar al siguiente paso: imitarle, “andar en amor”.
Creo que en ocasiones no imitamos a Dios en el amar porque aún estamos identificados con una vieja naturaleza que nos dice que no podemos amar a otros porque no nos han amado, pero lo que Dios desea es que quitemos esta vieja manera de pensar, nos apropiemos de la nueva mente que nos ha dado, la de Cristo, (1 Corintios 2:16) y de los pensamientos que ha puesto en ella y lo imitemos en el amar pues esto es fundamental para poder amar a otros (Juan 13:34-35); si tratamos de amar como el mundo nos dice que se debe hacer (si me amas te amo, si lo mereces lo hago, si me enseñan a amar lo hago, porque no puedo dar algo que nunca me dieron, etc.) nunca podremos hacerlo. En cambio, si vemos el amar desde la perspectiva de Dios todo cobra sentido y se puede lograr, pues no soy yo quien lo hace sino Cristo a través de mi, pues nosotros sólo nos convertimos en un canal que permite que fluya Su amor.
¿Quieres entender un poco más sobre lo que significa ser canales del amor? Espera el devocional de mañana.
5. Comparte
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